09 noviembre, 2009

¿Estamos preparadas para trabajar en casa?





Hoy día cada vez se da más la modalidad del trabajo flexible, o sea, desde la casa. Que en realidad se transforma a:  "desde el jardín", "desde el colegio, "desde el auto", "desde el pediatra", "desde el súper". Porque ya que "estamos en casa" podemos con todo.
¿Cómo hacer para que la ayudante doméstica entienda que no estamos disponibles para toooodo? Creo que lo más importante, como siempre, es adelantarnos a las confusiones, planteando una rutina de trabajo para ambas. 
Idealmente, nuestro escritorio o taller debería estar lo más separado posible de las actividades domésticas. Separado del ruído de la aspiradora o del lavarropas, lejos de la puerta de entrada, lejos de la cocina, lejos del cuarto de los niños o del playroom. En algunos casos hasta se podría usar el play como escritorio, por supuesto solo mientras los hijos no están en la casa.
Respecto a la empleada habrá que instruirla sobre nuestra responsabilidad profesional, sobre lo que hacemos y qué tipo de ayuda necesitamos de su parte. Que además de las tareas domésticas que ella ya conoce debe administrar su tiempo y espacio para no interferir en nuestro mundo laboral. Por ejemplo que nunca atienda el celular, que atienda el teléfono de la casa con aptitud de secretaria, con más atención, que anote el nombre y teléfono de la persona que llamó. Que siempre atienda la puerta, aunque estemos. Que se haga cargo de los pedidos de tintorería, verdulería, etc.
Cuando hay niños muy chiquitos, se complica el tema. Saber que su mamy está en casa pero no puede o no "quiere" estar con él es motivo para berrinches y mal humor. En ese caso, necesitamos a una empleada sensible y muy habilidosa que sepa conquistarlo con un programa mucho mejor de lo que mamy pueda ofrecer en ese momento. Porque muchas veces decidimos el camino más fácil que es ponerlo a dibujar mientras charlamos por teléfono o estamos en internet, y resulta que a los pocos minutos el nene se aburrió y atenta sobre la paz del ambiente. Terminamos "empujandólo" a otra persona, y que esté lejos de nosotras. Lo que causa angustia y bronca a madre e hijo/a. 
¿Soluciones? Sé que no plantée muchas, ya que las veo escasas. Sobretodo cuando hay niños en casa y cuando no hay una habitación apropiada para desarrollar nuestra labor. De cualquier manera creo que lo más importante es la planificación de la agenda de la casa y del trabajo para que la armonía siga vigente en el hogar.  Suena raro "disciplinar" el hogar en pro de nuestra actividad laboral, sin embargo si no nos ordenamos no hacemos ni una cosa ni otra. Además nuestra empleada termina sin dirección y nosotras  agotadas, trabajando más horas que en una oficina.
Les dejo una nota que salió hoy en el diario La Nación, sobre uno de los trabajos que se desarrollan en casa.
Por un ingreso complementario
Venta directaMás de 65 millones de personas en el mundo se dedican a comercializar productos entre su red de contactos; para ellas manejar sus horarios es una prioridad

1 comentario:

Bilu dijo...

Quebra tudo prima!!!!
Viras no Brasil este ano????
Bjão.

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